¿Qué es un KPI y qué importancia tiene para mi eCommerce?

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Los KPI son importantes si te dedicas al posicionamiento SEO y al mundo de las redes sociales, ya que miden con precisión si estamos llevando a cabo una buena estrategia online

En todo negocio es necesario comprobar si las medidas adoptadas están traduciéndose en resultados positivos para la empresa. Las estrategias de marketing online también requieren de estos medidores que nos permitirán saber si nuestro desempeño es el correcto o si debemos modificar en algún aspecto nuestro plan de actuación. Ahí es donde entran en funcionamiento los KPI, esos pequeños medidores que nos harán la vida más sencilla.

Los KPI son importantes si te dedicas al posicionamiento SEO y al mundo de las redes sociales, ya que miden con precisión si estamos llevando a cabo una buena estrategia online

Cuando hablamos de KPI (Key Performance Indicators) nos referimos a los indicadores que analizan si estamos desempeñando bien nuestra actuación. Los KPI son métricas que nos sirven para medir los resultados de una campaña de marketing en social media y nos dicen si estamos alcanzando nuestros objetivos fijados. Por ejemplo, imaginemos que somos una empresa de muebles que se ha fijado vender un número determinado de sofás al año. Pues el KPI sería el número de estos muebles que ha vendido un determinado vendedor de nuestra empresa en un espacio de tiempo. Si durante ese periodo nuestro número establecido se queda muy lejos de las ventas reales, tendremos que modificar nuestro objetivo o tomar otras estrategias que nos posibiliten alcanzar esa cifra.

Recuerda que los KPI son inductores, pero no sirven para medir resultados. Solo sirven para saber si estamos haciendo bien las cosas. También debes entender que hay otras métricas que sirven para saber cómo va la empresa, pero no son las que propician su éxito.

Características de los KPI

Para que una métrica sea considerada un KPI con una funcionalidad determinada, debe cumplir una serie de características:

  • Medibles: Los KPI tienen que ser medibles porque deben reflejar la rentabilidad de nuestras acciones. Por ejemplo, adoptemos el caso a una tienda online de moda deportiva. El número estimado de zapatillas vendidas online durante una semana sería un KPI que nos mostraría si estamos llegando a nuestro objetivo anual.
  • Alcanzables: por supuesto es fundamental que nos fijemos objetivos que se puedan cumplir dentro del plazo determinado. Una tienda de zapatillas deportivas no puede fijarse aumentar sus registros en un 300% durante la semana, por ejemplo, debe ser algo más gradual y acorde con la realidad.
  • Relevantes: la cantidad de KPIs de los que podemos disponer es enorme, pero deberemos seleccionar solo aquellos que tengan algún tipo de interés para nosotros. Por ejemplo, si hablamos de los datos que puede ofrecernos una red social como Facebook, podemos encontrar KPI en referencia a comparticiones, me gusta, o clics en los enlaces que publicamos, entre otros. Deberemos escoger solamente los que nos interesen para saber si estamos aumentando nuestros registros o no.
  • Disponibles: si nos hemos fijado un periodo de tiempo de seis meses, por ejemplo, deberemos observar que los KPIs que estén disponibles sean acordes a ese plazo de tiempo. No podemos utilizar las métricas anuales porque nosotros solamente queremos disponer del primer periodo del mes.

 

¿Qué KPIs debo escoger?

Con frecuencia, el encargado de llevar a cabo la estrategia de Social Media de una empresa termina por enredarse en el mundo de los KPI’s a la hora de escoger cuáles son los más indicados para continuar su labor y cuáles no. En Comenzando de cero nos muestran las preguntas que deberíamos hacernos antes de escoger un KPI.

  • ¿Qué objetivos nos hemos propuesto? Antes de nada deberemos saber qué objetivos son los que queremos cumplir. Es necesario hacer una lista previa para saber en qué redes queremos estar y cómo pensamos lograr las metas que nos hemos planteado.
  • ¿Estos KPI están dentro de las metas de la compañía? Cuando hemos establecido el objetivo de nuestra empresa, deberemos comprobar si estos KPI afectan o no a las metas que nos hemos planteado.
  • ¿Se pueden comparar? Deberemos establecer si estos medidores se pueden comparar con otros datos que teníamos antes de llevar a cabo nuestra estrategia. Así sabremos si estamos logrando el objetivo con respecto a los resultados anteriores.
  • ¿Podemos saber el ROI con este KPI? El retorno de la inversión es una de las claves que más interesa a una empresa para saber si está llevando bien la gestión de la estrategia. Por lo tanto, si el KPI no nos ayuda a calcular este dato, no estaremos escogiendo bien la métrica.
  • ¿A quién vas a presentarle los datos? Los KPIs tienen que ir destinados a alguna persona responsable de hacer balance. Debes saber qué KPI le interesa a cada departamento antes de decantarte por uno o por otro.
  • ¿Qué periodo de tiempo vamos a escoger? Deberemos supervisarlo diariamente, pero la presentación de los informes debe ser periódica. Hay que establecer un periodo definitivo y, en consecuencia, escoger un determinado KPI sobre otro.
  • ¿Qué herramientas utilizaremos para medirlos? Hay determinadas herramientas y profesionales para elegir los KPIs más adecuados y medirlos según su relevancia. Es importante que elijamos primero las plataformas que vamos a utilizar antes de llevar a cabo la decisión final de KPI.

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