Tendencias y desafíos de la logística actual

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Las empresas logísticas deben mirar el entorno en el que se mueven y tener en cuenta  las tendencias y desafíos que están por venir:

-El aumento de las grandes ciudades.

Actualmente, entorno al 50% de la población mundial vive en áreas urbanas, y se espera que alcance el 60% en 2030. Esto supondrá un incremento de la demanda de productos y hará subir el precio de materias primas y alimentos para abastecer estas áreas. Para hacer frente a esta demanda, las grandes ciudades necesitarán un sistema de transporte bien estructurado y ágil. Para tener éxito, las empresas logísticas deben ser capaces de adaptarse a estos cambios manteniendo sus niveles de calidad en el servicio y estableciendo redes de distribución que les permitan llegar a cualquier punto cada vez más rápido.

-Envejecimiento de la población.

El envejecimiento de la población se está produciendo en todo el planeta, pero es más avanzado en los países desarrollados. Esto ocurre cuando aumenta la esperanza de vida y/o disminuye la natalidad. Este cambio demográfico supone, entre otras cosas, una generación adulta con más poder adquisitivo que nunca. Las empresas logísticas deben tenerlo en cuenta ya que tendrán que satisfacer el aumento de la demanda de productos que en muchos casos deben ser entregados a domicilio.

-La complejidad del crecimiento por la globalización.

Cuando el comercio mundial aumenta, también lo hace su complejidad. Las nuevas tecnologías y las soluciones IT se hacen necesarias para que las empresas de logística puedan seguir siendo lo suficientemente agiles como para adaptarse a las demandas de los mercados. Invertir en ello se convierte en algo esencial para sobrevivir.

-Materias primas caras.

La disminución de los recursos naturales, las fluctuaciones del mercado y los impuestos locales, han incrementado el coste del combustible y las materias primas. Esto ha aumentado los costes de fabricación y transporte, incrementando el precio final de los productos para los consumidores. Estos cambios están influyendo en el abastecimiento y comportamiento de compra y obliga a las empresas a replantearse cómo abastecerse de materias primas y cómo distribuir de forma más eficiente sus productos.

-Mayor atención a la sostenibilidad.

Debido al aumento de las emisiones de CO2, las empresas  tienen que ser claras y concisas sobre el respeto al medio ambiente de sus productos. La sostenibilidad se convertirá en un criterio de compra clave.

Los Gobiernos y consumidores exigen ahora a las empresas productos respetuosos con el medio ambiente y prácticas empresariales sostenibles. En cualquier caso, mientras el 40% dice que quiere productos respetuosos con el medio ambiente, solo un cuatro por ciento de los consumidores realmente lo compra. Esto representa una oportunidad para las compañías que pueden optimizar la eficiencia en sus procesos y hacer que los productos “sostenibles” sean accesibles a consumidores con menos poder adquisitivo.

-El crecimiento de las clases medias.

Más de 70 millones de consumidores acceden a las clases medias cada año, sobre todo en los mercados emergentes. Estos consumidores, que cada vez están más al día de nuevos productos y tecnologías y tienen mayor poder adquisitivo, representan una excelente oportunidad para las empresas.

-El desarrollo tecnológico.

La tecnología evoluciona a un ritmo vertiginoso. Se lanzan nuevos productos constantemente.  Algunos de estos productos como el Smartphone, por ejemplo, lo utilizan un 41% de sus usuarios para realizar compras.

El corto ciclo de vida de los nuevos productos implica diferentes retos: cambio de canales de venta y distribución; nuevos mercados y modelos de negocio; una demanda que cambia rápidamente y la disminución constante de los precios de los productos.

Además de retos, la tecnología también brinda nuevas posibilidades como son por ejemplo los sistemas de posicionamiento global (GPS) y sistemas de radio frecuencia, proporcionando mayor visibilidad y seguridad. Esto permite mejorar los procesos de planificación y tiene un impacto positivo para los procesos logísticos.

 Como conclusión, las empresas logísticas deben tener en cuenta y prever todos los factores que condicionan su entorno y por lo tanto la forma de operar. Tienen que adelantarse a las tendencias para poder ofrecer soluciones flexibles y que se adapten a los constantes cambios.

Un operador logístico debe valorar e invertir en el uso de nuevas tecnologías que le permitan dar servicio a los nuevos modelos de negocio y a su vez optimizar sus procesos de manera que sea posible ser competitivo.

 

Autor: Luis Carvajal

Alumno del Máster en Dirección eCommerce





Master en dirección ecommerce




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